Descendiente de la 77.ª generación de Confucio muere en Beijing

Uno de los descendientes modernos del maestro más grande de China, Confucio, murió en medio del resurgimiento masivo de COVID-19 que está arrasando el país e infectando a cientos de millones.

Kong Deyong (孔德墉), de 96 años, murió el día de Navidad en Beijing, según un obituario publicado por su familia en línea. El obituario dio «infección pulmonar» como la causa de su muerte.

Confucio vivió hace unos 2500 años y pasó su vida viajando por los estados feudales chinos exhortando a los gobernantes a gobernar a su pueblo con compasión y moralidad. Su pensamiento articula las virtudes tradicionales de la ética familiar, el respeto por los mayores y el refinamiento espiritual que impulsaron la civilización china durante milenios y tuvieron un efecto duradero en todo el este de Asia.

Los descendientes del filósofo viven tanto en China continental como en Taiwán y llevan el apellido Kong (孔). “Confucio” es la forma latina del original chino Kong Fu Zi (孔夫子), que significa “Maestro Kong”. Su clan es una de las familias más longevas del mundo, rivalizando incluso con la genealogía de la línea imperial japonesa semilegendaria.

Se cree que cientos de millones de chinos han contraído COVID-19, la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2, en las últimas semanas, según estadísticas filtradas anunciadas durante una reunión interna de la Comisión Nacional de Salud. Los expertos extranjeros estiman que millones podrían morir a medida que el sistema de salud de China se esfuerza bajo la carga de la pandemia.

Kong Deyong fue presidente de la Sociedad Mundial de la Fraternidad de los Descendientes de Confucio (World Confucius Descendants Association), fundada en 2005 bajo los auspicios del Partido Comunista Chino (PCCh).

Si bien el PCCh es conocido por usar el nombre de Confucio para promover su ideología marxista en el extranjero bajo la apariencia de intercambios culturales, el régimen una vez atacó brutalmente al confucianismo como parte de la “vieja sociedad malvada”.

En la Revolución Cultural (1966-1976), se alentó a los Guardias Rojos a golpear y abusar de sus maestros, destruir templos confucianos y quemar antiguos clásicos chinos. Las tumbas de Confucio y sus descendientes en su ancestral ciudad natal de Qufu, provincia de Shandong, fueron excavadas como último insulto hacia el venerado sabio.

Kong Deyong, nacido en 1926, se unió a las filas de los comunistas chinos en 1948, sirviendo al Partido en un trabajo logístico mientras los ejércitos del PCCh luchaban contra las fuerzas gubernamentales. Tras la toma de poder comunista de China continental, Kong trabajó en el Instituto Chino de Investigación Musical (中国音乐研究所).

Como pariente de Confucio, Kong “sufrió ataques” durante la Revolución Cultural, según su obituario. Más tarde se mudó a Hong Kong para emprender una carrera en los negocios y en 2009 ayudó a compilar una extensa genealogía del clan Confucio que enumera 2 millones de parientes.

Kong Deyong fue el miembro más destacado del clan Confucio en China continental; sin embargo, la principal línea de descendencia del sabio está en Taiwán, oficialmente la República de China. (Los hombres en la antigua China a menudo tomaban concubinas, y los hijos nacidos de la esposa principal se consideraban descendientes directos)

Kung Te-cheng (孔德成), quien falleció en 2008, era el hijo mayor de la 77.ª generación de la familia Confucio. Fue profesor en la prestigiosa Universidad Nacional de Taiwán. Durante la Segunda Guerra Mundial, se dijo que rechazó una oferta del Ejército Imperial Japonés invasor para servir como monarca títere de China.

El representante actual de la línea principal de descendencia es Kung Tsui-chang (孔垂長), de 47 años, descendiente de Confucio en la 79.ª generación. Vive en Taiwán y tiene el título honorario del gobierno de la República de China de Oficial Ceremonial de Confucio (大成至聖先師奉祀官).