Dengue: Ministro de Salud en Argentina denuncia presiones de laboratorios y de la ‘casta’ para impulsar la vacunación masiva
En medio del pánico generalizado por el actual brote de dengue en Argentina, Mario Russo, ministro de Salud de Javier Milei, explicó con detalle y argumentos claros, la postura del gobierno para afrontar la situación y por qué la vacunación masiva no es una opción en este momento.
La reveladora entrevista se dio en el programa de Jonatan Viale, en TN. El ministro denunció presiones por parte de los laboratorios y la ‘casta’ para incorporar la vacuna en el calendario obligatorio de inmunizaciones.
Hasta el momento, las gestiones del Ministerio de Salud respecto al brote del dengue venían siendo de bajo perfil para tratar de mantener la calma y evitar la psicosis vivida hace unos años atrás con el Covid-19, y así poder avanzar con medidas verdaderamente efectivas y racionales.
Sin embargo, la creciente presión mediática, el brote inédito de mosquitos y el aumento de los contagios han hecho que, de todas formas, el panorama de crisis sanitaria vuelva a resurgir. Como resultado, ahora hay una población desesperada por soluciones urgentes, desabastecimiento y sobreprecios en insumos como repelentes y espirales, y por supuesto, la presión para que llegue la vacuna que mágicamente resuelva el problema.
En ese contexto es que el ministro Russo buscó dar los fundamentos desde la ciencia y de lo que se sabe hasta el momento, y además, tratar de hacer entender que la vacunación en este momento -aún si ya hubiese pasado por todas las fases de prueba para su indicación masiva- no resolvería el brote inmediato porque, para lograr la inmunización, la vacuna tiene que darse en dos o tres dosis, con un lapso de seis meses entre cada aplicación, por lo que la inmunización se lograría recién a principios o mediados del año que viene.
“Lo que nosotros decimos, para que quede bien claro, es que la vacuna es segura y eficaz. Ahora bien, yo soy el Ministro de Salud y tengo la responsabilidad de tomar una determinación acerca del Calendario Nacional de Inmunización en la Argentina. Lo único que nosotros dijimos es lo que dijo la OPS y lo que nos aconseja la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CONAIN), lo que nos dicen nuestros expertos y lo dice todo el mundo: la vacuna no es una herramienta validada para mitigar el brote», acotó.
En este sentido, el funcionario explicó que existen ciertas empresas que producen vacunas contra el dengue que están financiando operaciones de prensa en contra del Gobierno Nacional para impulsar la vacunación masiva.
“¿A usted no le llama la atención que hace cuatro días que estoy en cadena nacional, desde las 7 hasta las 23? Porque aprietan. Aprietan los laboratorios, aprieta la casta. Entiendo que es multicausal, no es mi responsabilidad determinar por qué. Tenemos que empezar a hablar con la verdad», sentenció Russo.
«Es mejor decir una verdad incómoda. Hay intereses. El Presidente está convencido de lo que hacemos y las decisiones que vamos a tomar en el área de salud tienen que ver con la evidencia científica que tenemos en este momento para tomar decisiones, no con aprietes”, continuó.
El ministro explicó que la vacuna contra el dengue todavía se encuentra en Fase 4. Es decir, no está aprobada para vacunación masiva, por lo que este gobierno no va a implementarla compulsivamente solo para aumentar las ventas de los sectores interesados.
“La decisión, hasta el momento, es no incluir la vacuna en el Programa Nacional de Inmunizaciones. Nosotros estamos trabajando en forma conjunta con la OPS y la CONAIN, haciendo lo que se llama la farmacovigilancia. Es decir, esta es una vacuna que ha superado la Fase 3, en una población de 20.000 pacientes que ha sido segura y efectiva. Pero que todavía está en esta fase de prueba en el terreno que se llama la Fase 4, que es la de farmacovigilancia”, detalló Russo.
En Brasil por ejemplo, se está probando la aplicación de la vacuna en una población de niños entre 10 y 14 años desde marzo de 2023, y ya hay conclusiones sobre los riesgos de hipersensibilidad y anafilaxia.
Por otro lado, el funcionario comentó ahora mismo la vacuna está disponible en el sector privado para aquel que quiera aplicársela con prescripción médica y bajo el riesgo individual de ponerse una vacuna experimental: «La decisión es personal de cada habitante con su médico de cabecera, porque les recuerdo que esta vacuna necesita prescripción médica para aplicarse”.
“Algunas veces, uno siente que algunos pseudocientíficos que pululan por los medios de comunicación y se los presenta como grandes profesores, que muchas veces, muchos de ellos, tienen un muy buen currículum y son personas muy capacitadas, tienen algún conflicto de intereses”, agregó.
Días atrás en otra entrevista, el ministro también habló de que para mitigar el brote actual lo más efectivo es el uso de repelentes y espirales, la prevención de la picaduras evitando el uso de pantalones cortos y remeras sin mangas, el descacharrado en los hogares etc.
Desde el gobierno apuntan a la gestión anterior por la «falta de prevención» el año pasado, para una temporada que arrancó en noviembre.
Asimismo, aseguran que el ministro Russo es de plena confianza del presidente Javier Milei, y consideran “que desempeña de manera exquisita sus labores».
Se abren las importaciones de los repelentes
La locura generalizada de la población por conseguir repelentes ha llevado a que la gente pague cualquier precio por esos productos, con desabastecimiento permanente en las góndolas y hasta el uso de productos sustitutos como shampoo para el cabello o esencia de vainilla para reemplazarlo.
En este sentido, la demanda de repelente creció 300% en febrero según el principal fabricante. «Se realizan esfuerzos extraordinarios para abastecer a todos los puntos de venta y aumentar su disponibilidad, produciendo en la actualidad tres veces más de lo habitual y aprobando la venta de distintos formatos de envases para poder maximizar la producción», indicó SC Johnson en un comunicado.
Ante esa situación, el gobierno decidió incluir los repelentes en la lista de bienes de la canasta básica a los que el Gobierno les otorgó facilidades para importar.
Así, repelentes e insumos para repelentes entraron en la resolución de pago al exterior en 30 días y suspensión de doble IVA y Ganancias por 120 días.
Este jueves el Ejecutivo también decidió suspender los trámites del ente regulador ANMAT por 30 días y habilitar la compra puerta-a-puerta desde el exterior, para facilitar la oferta de estos productos, siguiendo la línea de economía de libre mercado del actual gobierno.