Conmemoran en Miami segundo aniversario de marcha del 11J en Cuba: “El objetivo es lograr la libertad”
El 11 de julio de 2021, miles de cubanos salieron a las calles de la isla caribeña para protestar contra el ejecutivo liderado por Miguel Díaz-Canel, denunciar su gestión y reclamar libertad para el pueblo cubano.
Fueron unas históricas manifestaciones que pusieron en jaque al gobierno castrista y cuyas imágenes, con personas portando carteles con lemas de “Somos más” y “No tenemos miedo”, dieron la vuelta al mundo.
Estados Unidos reaccionó de inmediato a estas protestas y tanto legisladores republicanos como demócratas salieron a apoyar las marchas “en pro de la libertad de Cuba”.
El senador demócrata por Nueva Jersey Bob Menéndez, de origen cubano, describió como «una jornada histórica» esas protestas.
«El mundo entero ha sido testigo de cómo miles de cubanos se vieron forzados a salir a las calles para exigir el fin de la dictadura en su país. A pesar de la persecución del día a día en la isla, el pueblo cubano se ha unido valientemente para pedir que se les permita poder vivir con seguridad y decir lo que piensan libremente y sin miedo alguno», agregó al respecto.
El senador republicano por Texas Ted Cruz se mostró convencido de que “el régimen comunista cubano será arrojado al basurero de la historia” y denunció las acciones del gobierno cubano al señalar que se “ha brutalizado y negado la libertad a generaciones de cubanos”.
Con motivo del segundo aniversario de estas históricas marchas, miembros de ambos partidos del Congreso de Estados Unidos se reunieron en Miami, Florida, para participar en una sesión especial del Comité de Relaciones Exteriores del Congreso con el objetivo de conmemorar este día y apoyar estos movimientos cuyo fin es el de “conseguir la libertad de Cuba”.
“Los cubanos quieren vivir como cualquier persona”
Durante la sesión especial, la representante republicana por la Florida María Elvira Salazar lamentó que “después de 60 años de dictadura castrista” aún se está luchando “por traer la libertad” a la isla caribeña.
“Tenemos el privilegio de ser cubanoestadounidenses de primera generación. Pero no podemos olvidar lo que vivieron nuestros antepasados y lo que siguen viviendo los cubanos en la isla”, dijo Salazar durante la sesión especial.
Además, subrayó que “los cubanos son como cualquier persona del hemisferio occidental” recalcando que “quieren libertad, que quieren viajar, que quieren alimentar a sus hijos, quieren poder casarse, estudiar y encontrar la felicidad de acuerdo con sus propias necesidades”.
En ese sentido, Salazar, que se desempeña como la presidenta de la Subcomisión del Hemisferio Occidental del Congreso de Estados Unidos, denunció que el gobierno cubano sigue utilizando “un aparato represivo” contra el pueblo, por lo que considera que esa es la razón principal por la que aún no se ha podido conseguir “la libertad” que tanto se reclamó en esas históricas marchas del 11 de julio de 2021, y que también conmemoran desde la esfera política de Estados Unidos.
Al encuentro también asistieron los legisladores republicanos Mario Díaz-Balart y Michael Waltz, y por el lado demócrata, los representantes Debbie Wasserman Schultz y Jared Moskowitz, que durante mucho tiempo han expresado su apoyo al pueblo cubano.
La presencia de China en Cuba
En la reunión también se abordaron los informes de la inteligencia estadounidense que afirman que China está reforzando su infraestructura para la recolección de datos en países extranjeros. De hecho, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, admitió que cuando el ejecutivo liderado por el presidente Joe Biden asumió el cargo en 2021 tuvieron constancia de los movimientos de Beijing.
“Se nos informó sobre una serie de esfuerzos sensibles de Beijing en todo el mundo para expandir su infraestructura de logística, base y recolección de datos en el extranjero, para permitirles proyectar y mantener el poder militar a mayor distancia”, explicó Blinken hace unas semanas.
El representante Michael McCaul, republicano por Texas, que también acudió a la cita de Miami, advirtió que esos movimientos del gigante asiático suponen “un claro peligro para la seguridad nacional de Estados Unidos” y que “no pueden ser tolerados”.
En ese sentido, Wasserman Schultz también tildó de “absolutamente inaceptable” los acercamientos de China y de otros países como Rusia e Irán y defendió que se sigan aplicando sanciones.
“No podemos permitir que siga la represión, por lo que tenemos que continuar aplicando sanciones y asegurarnos de que el régimen entienda que el único camino es unirse a los pueblos democráticos, permitiendo elecciones libres y justas”, manifestó.
La organización Justicia 11J, encargada de velar por los derechos de los manifestantes en Cuba, confirmó a la Voz de América que en las históricas marchas del 11 de julio de 2021, 1.558 personas fueron detenidas y que 682 aún continúan en prisión.
Reclaman más sanciones
La disidente cubana Rosa María Payá, hija del desaparecido activista y líder del Movimiento Cristiano Liberación, Oswaldo Payá, también participó en esta sesión especial en el emblemático Museo de la Brigada de Asalto 2506.
Al igual que los legisladores republicanos y demócratas, ella también pidió la implementación de más sanciones al gobierno de Cuba para limitar sus movimientos y minimizar “la presencia militar china en nuestro territorio”.
“Estados Unidos debe expandir las sanciones individuales para incluir a funcionarios del régimen cubano, vigilar los proyectos militares, los agentes de seguridad y militar chinos en Cuba”, dijo.
Según Payá, en 2022 se registraron más de 3.000 protestas en la isla. “Y continúan hoy en día porque la gente está convencida de que para salir de la crisis, debemos deshacernos de la dictadura, y es por eso que decidimos proponer una hoja de ruta para hacerlo posible a través de la movilización de la ciudadanía”, añadió acerca de las marchas que se han ido realizando en Cuba para protestar contra el gobierno de la isla.
Cuba dice que Estados Unidos esta detrás de las protestas
Por su parte, el gobierno de Cuba acusó a la Casa Blanca de tener una “responsabilidad directa en los disturbios del 11 y 12 de julio de 2021” porque “desde su territorio se incitó y financió abiertamente a individuos y grupos a que cometieran violaciones de la ley”.
“Ello incluyó acciones de violencia, robo, asalto, agresión, además que se ejecutó desde allí, durante semanas previas, una campaña de desinformación y calumnias por las redes digitales”, reza un editorial publicado en el diario Granma, propiedad del Partido Comunista de Cuba.
Además, desde el periódico se criticaba que “la maquinaria terrorista miamense utiliza” las redes sociales y los medios de prensa “para convocar al caos, a la violencia, la agresión a las autoridades, el terrorismo y la desobediencia civil”.
“En lo que va de año se han registrado más de 300 convocatorias de ese tipo desde territorio de Estados Unidos y otros países que incitan a actuar contra el gobierno cubano, la manipulación de reclamos por situaciones creadas por la propia maquinaria desestabilizadora”, apostillaba el editorial de Granma.
Crédito: Voz de América