China Daily ya no se distribuye en la Cámara de Representantes de EE. UU.: lecciones aprendidas

El Comité de Administración de la Cámara de Representantes anunció el 11 de marzo de 2025 que China Daily ya no se distribuirá en los edificios de oficinas de la Cámara, poniendo fin a la entrega de 42 años de propaganda del Partido Comunista Chino (PCCh) a los miembros de la Cámara y su personal.

Estados Unidos siempre ha valorado la libertad de expresión. Incluso cuando el discurso proviene de los adversarios del país, se confía en que los estadounidenses decidan por sí mismos qué creer. Así, China Daily se registró como agente extranjero en 1983, y desde entonces se entregaron números a las oficinas de los miembros del Congreso.

Mirando el panorama general, la distribución de China Daily en el Congreso es solo una parte de la infiltración del PCCh en los medios de comunicación, la cultura y otros aspectos de la vida cotidiana. El PCCh se ha aprovechado de la sociedad abierta y libre de Estados Unidos durante años, y Estados Unidos subestimó el daño de gran alcance del «lavado de cerebro blando» a través de esta infiltración silenciosa. Este es uno de los muchos experimentos fallidos de «apertura de la libertad al totalitarismo».

China Daily colabora con medios de comunicación occidentales

China Daily trabajó con el New York Times, el Washington Post y otros medios de comunicación para incluir China Watch, un anuncio pagado que presenta las narrativas oficiales del PCCh, pero hecho para parecerse a otras páginas de noticias. De este modo, innumerables lectores son engañados.

Este tipo de colaboración continuó durante años y solo se detuvo en 2020 debido a las objeciones del público. El PCCh utilizó la libertad de expresión en la sociedad occidental como una forma de «pedir prestado un barco para salir al mar».

Diario del Pueblo cerca de la Casa Blanca

China Daily es solo uno de los principales medios de comunicación del PCCh que circulan en Estados Unidos. La versión en inglés del Diario del Pueblo, una publicación oficial del PCCh, se puede encontrar en cajas de periódicos cerca de la Casa Blanca.

Para ponerlo en perspectiva, el PCCh nunca permitiría que el Washington Post se distribuyera cerca de Zhongnanhai (el complejo del Partido en Beijing). Tal vez la gente de la mayoría de los países occidentales no se dé cuenta de que, en China, el PCCh prohíbe Google, YouTube y Facebook.

CGTN contrata presentadores no chinos

Como división internacional de la CCTV estatal, los contenidos de la Red de Televisión Global de China (CGTN) están estrictamente censurados por el Departamento de Propaganda del PCCh (también conocido como Departamento de Publicidad). Sin embargo, al contratar presentadores y reporteros no chinos, CGTN tiene como objetivo reducir la vigilancia de la audiencia.

El PCCh utiliza las «diversas voces» de las sociedades democráticas como método de empaquetado para «contar bien la historia de China».

Infiltración cultural a través de los Institutos Confucio

Los Institutos Confucio son uno de los «proyectos culturales» de poder blando promovidos por el PCCh en todo el mundo. Aunque en la superficie enseñan el idioma y la cultura chinos, las instituciones son una herramienta para propagar la ideología y las narrativas del PCCh mientras reprimen a los disidentes.

Por ejemplo, el Instituto Confucio anunció que sus profesores no pueden participar en actividades relacionadas con Falun Gong, una disciplina espiritual que ha sido perseguida por el PCCh desde 1999. El plan de estudios de los Institutos Confucio sigue estrictamente las directivas del PCCh y evita los temas que el Partido considera «sensibles». Esto convirtió un proyecto de «intercambio cultural» en una herramienta de lavado de cerebro unidireccional que erosiona la independencia de la academia estadounidense.

Autocensura en Hollywood

Durante décadas, la cultura estadounidense se ha introducido en el mundo a través de las películas de Hollywood, pero a medida que los estudios fueron respaldados o comprados gradualmente por el PCCh, el enfoque cambió.

En la trama original de Red Dawn, una película bélica de acción estadounidense de 2012, Estados Unidos fue invadido por China. Para poder mostrarse en China, el estudio tuvo que gastar millones de dólares para hacer que las fuerzas invasoras fueran norcoreanas. Tal censura y autocensura es ahora común: las industrias de las artes y el entretenimiento perdieron su libertad creativa y se inclinaron ante el régimen totalitario.

La autocensura de la NBA

Cuando la gente en Hong Kong protestó contra el proyecto de ley contra la extradición en octubre de 2019, Daryl Morey, gerente general de los Houston Rockets, publicó una foto en Twitter con la leyenda «Lucha por la libertad. Apoyen a Hong Kong». El PCCh se quejó de inmediato.

Morey se vio obligado a eliminar la publicación y disculparse. La estrella de Los Angeles Lakers, LeBron James, también criticó a Morey e insinuó que la publicación afectó el negocio de la NBA en China. Algunos creen que los comentarios de James muestran que apoya al PCCh.

Algoritmo de TikTok

TikTok es la versión extranjera de Douyin, y su empresa matriz, ByteDance, está controlada por el PCCh. Las investigaciones han demostrado que el algoritmo de TikTok puede utilizarse para amplificar el contenido a favor del PCCh y suprimir temas que el Partido considera «sensibles». En lugar de un adoctrinamiento obvio, estos algoritmos están diseñados para crear «capullos de información» para que los jóvenes impresionables acepten gradualmente las narrativas del régimen a través del entretenimiento.

Estos ejemplos señalan las vulnerabilidades de una sociedad libre cuando es atacada e infiltrada por el PCCh. La libertad de la que disfrutamos está siendo utilizada como un arma por el régimen para erosionar y destruir nuestra sociedad desde dentro. En China, mientras tanto, el PCCh bloquea la información a voluntad.

Pasar a la acción

Las democracias están despertando poco a poco y se están volviendo menos ingenuas. Se han hecho más esfuerzos para contrarrestar la infiltración del PCCh en Estados Unidos. Se ha exigido a los medios de comunicación del PCCh que se registren como agentes extranjeros, los Institutos Confucio están cerrando e incluso Hollywood ha dejado gradualmente de autocensurarse para complacer al PCCh.

Por ejemplo, durante el rodaje de Top Gun: Maverick, un drama de acción estadounidense de 2022, las banderas de la República Popular China y la bandera de Japón se eliminaron inicialmente de la chaqueta de vuelo del personaje principal. Más tarde, el productor restauró las banderas y decidió no estrenar la película en China. La Corte Suprema de Estados Unidos también confirmó una ley que exige que TikTok se venda o se prohíba en enero de 2025.

El 5 de febrero de 2025, el recién elegido congresista estadounidense de Arizona, Abraham Hamadeh, presentó su primera resolución un mes después de asumir el cargo. La H. Res. 110, «Prohibiendo la distribución de publicaciones controladas por el Partido Comunista Chino dentro de las instalaciones de la Cámara de Representantes, y para otros fines», tuvo 20 cosignatarios. El sitio web oficial del representante Hamadeh declaró: «Es personal para él: cree que el Congreso debería ser un lugar donde brillen las voces de los estadounidenses, no un escenario para un régimen hostil como el PCCh».

La prohibición de la Cámara de Representantes de EE. UU. de circular China Daily ayuda a evitar que el PCCh continúe difundiendo mentiras en el Capitolio. Aunque este movimiento llegó tarde, es un paso en la dirección correcta.

Fuente: Minghui.org