¿Cambio de poder en Beijing? Un partidario de Xi es derrocado en Xinjiang mientras los líderes del Partido contraatacan

La reciente destitución de Ma Xingrui, un aliado de confianza de Xi Jinping y secretario del Partido para Xinjiang, ha conmocionado a la clase política china. La destitución de Ma marca la primera vez que un miembro del Politburó en funciones, perteneciente al círculo íntimo de Xi, es expulsado, lo que señala lo que los analistas consideran el inicio de una contraofensiva coordinada de la vieja guardia del Partido Comunista.

La repentina destitución de Ma Xingrui ha suscitado dudas sobre si se ha visto envuelto en serios problemas políticos. Originario de Shandong, la misma provincia que la esposa de Xi, Peng Liyuan, Ma fue considerado en su momento una estrella en ascenso, gracias a su experiencia en la industria aeroespacial china. Sin embargo, ese sector se ha convertido en un campo minado político, con varios altos funcionarios previamente purgados.

Xi pierde terreno

El comentarista político Chen Pokong ofrece una visión más matizada. «Los medios estatales informan que Ma Xingrui ya no es secretario del Partido, miembro del Comité Permanente ni miembro del Comité de Xinjiang, lo que significa que técnicamente sigue siendo miembro del Politburó. Incluso compareció en la reunión del Politburó del 30 de junio», señaló Chen.

La explicación oficial afirma que Ma está siendo «asignado a otro puesto». Pero Chen señala que la frase suele ser engañosa. «Esa afirmación puede tomarse como una verdad a medias; normalmente significa que se está preparando otro puesto».

Chen recordó el caso de Jing Junhai, quien fuera asesor de confianza del padre de Xi Jinping, Xi Zhongxun. Jing fue destituido como secretario del Partido en Jilin bajo la misma vaga promesa de reasignación. Sin embargo, tras la turbulencia política de la Tercera Sesión Plenaria —cuando, según se informa, Xi enfermó gravemente y el general Zhang Youxia asumió el poder militar—, la carrera de Jing se estancó abruptamente. Fue relegado a funciones ceremoniales dentro de la Asamblea Popular Nacional y la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino.

La carrera de Jing Junhai terminó abruptamente con la decadencia del poder de Xi Jinping. Ahora, con la supuesta reasignación de Ma Xingrui, sospecho que esa frase solo tiene la mitad de su significado original, dijo Chen.

¿Están purgando a Ma Xingrui?

Chen enfatizó que la salida de Ma de Xinjiang no confirma necesariamente su purga, al menos no todavía. «Es posible que le asignen un nuevo puesto», dijo. El año pasado se especuló con una reestructuración en la Oficina General del Comité Central, con rumores de que Cai Qi renunciaría como director. En ese momento, se barajaron como posibles sucesores tanto a Ma Xingrui como a Wang Xiaohong.

«Si Ma Xingrui evita la caída, podría convertirse en director de la Oficina General», explicó Chen. «Otra posibilidad es que lo designen Ministro de Seguridad Pública».

Señaló las recientes apariciones de Wang Xiaohong, cuyo título oficial ha cambiado discretamente. Anteriormente conocido como Ministro de Seguridad Pública, ahora se le conoce con mayor frecuencia como Consejero de Estado o Secretario de la Secretaría. «Wang Xiaohong ha dedicado toda su carrera al sistema de seguridad pública y nunca ha ocupado un cargo en el gobierno local. Su nombramiento como ministro ya fue un ‘arreglo astuto'», dijo Chen.

Añadió: «Tras el Tercer Pleno, Wang, el principal confidente de Xi Jinping, podría haber quedado relegado, y es improbable que permanezca en ese cargo. Antes del Cuarto Pleno, es posible que algunas facciones presionen por un cambio en la cúpula del ministerio».

¿Otro escenario? Ma Xingrui podría ser designado para dirigir el Ministerio de Seguridad del Estado, donde el actual ministro y leal a Xi, Chen Yixin, ha desaparecido de la vista pública.

Un realineamiento más amplio

El analista político Jiang Feng cree que la destitución de Ma y el nombramiento de Chen Xiaojiang como su reemplazo no es sólo una reorganización del personal, sino una señal de cambios tectónicos detrás de escena.

Chen Xiaojiang, sin experiencia previa en la gestión provincial, fue ascendido a uno de los puestos más sensibles políticamente de China. «No se trata solo de la destitución de un hombre. Refleja un cambio más amplio al mando del sistema», declaró Jiang.

Aunque en teoría el traslado pueda parecer un traslado estándar del Departamento de Organización del PCCh, Jiang insiste en que el nombramiento de Chen fue todo menos rutinario. Chen, antiguo subordinado de Shi Taifeng, un miembro destacado del Politburó, también está vinculado al exvicepresidente Wang Qishan y a la Liga de la Juventud Comunista (Tuanpai), facción asociada al exlíder Hu Jintao.

“Chen Xiaojiang es esencialmente una figura híbrida: una mezcla de la Liga Juvenil, el sistema de inspección disciplinaria y el Frente Unido”, explicó Jiang. “No ascendió por una sola vía, sino que ha contado con la confianza constante de varios líderes del partido. Es un tecnócrata veterano, aceptado por múltiples facciones. Por eso fue elegido para Xinjiang: una figura de compromiso, una elección consensuada por las altas esferas del sistema”.

Jiang enfatizó que esta acción representa un punto de inflexión crucial. «No se trata de Xi Jinping jugando al ajedrez, sino del Partido. No es la partida inicial, sino la final. Es el primer contraataque de los líderes del partido».

¿Quién será el siguiente en la tabla de cortar?

Jiang advirtió que Ma Xingrui podría ser solo el primero de una serie de líderes provinciales alineados con Xi en ser reemplazados. Otros miembros del Politburó que actualmente se desempeñan como secretarios provinciales del partido son Yin Li en Beijing, Chen Min’er en Tianjin, Chen Jining en Shanghái, Yuan Jiajun en Chongqing y Huang Kunming en Guangdong.

“Cuanto más ampliamente instale Xi a sus leales en las provincias y ministerios durante el XX Congreso del Partido, más duro será este contraataque”, dijo Jiang.

Concluyó con una dura evaluación: la reorganización en Xinjiang es una señal de que la autoridad de Xi, otrora indiscutible, está empezando a desmoronarse, y la vieja guardia del Partido Comunista Chino está recuperando influencia.

Esta vez decidieron dar el primer golpe en Xinjiang. La pregunta ahora es: ¿quién será el próximo Ma Xingrui? Ya sea en la seguridad del Estado, la seguridad pública o las finanzas, ya ningún lugar es seguro.

Por Li Jingyao y Janet Huang

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Redacción Mundo Libre
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