Cada vez más empresas alemanas abandonan China

La proporción de empresas alemanas que abandonan el mercado chino o se plantean hacerlo se ha duplicado con creces hasta alcanzar el 9% en los últimos cuatro años, según una encuesta de la Cámara de Comercio Alemana en China.

La encuesta pone de relieve los retos a los que se enfrentan las empresas alemanas que operan en China, como la creciente competencia de las empresas locales, la desigualdad de acceso al mercado, los vientos en contra económicos y los riesgos geopolíticos, según la Cámara.

«El año pasado fue una prueba de realidad para las empresas alemanas que operan en China», declaró Ulf Reinhardt, Presidente de la Cámara para el Sur de China.

Alrededor del 2% de las 566 empresas encuestadas entre el 5 de septiembre y el 6 de octubre declararon que estaban vendiendo sus operaciones en China, mientras que el 7% afirmó que estaba considerando la posibilidad de hacerlo. Esta cifra contrasta con el 4% que abandonó China o se planteó hacerlo en 2020.

Por otra parte, el 44% ha tomado medidas para hacer frente a los riesgos relacionados con sus operaciones comerciales en China, incluida la creación de cadenas de suministro independientes de China.

La encuesta se publica medio año después de que el Gobierno diera a conocer una estrategia para reducir los riesgos de la relación económica de Alemania con China, su mayor socio comercial, y confirma los datos anecdóticos publicados por Reuters sobre la reducción de la dependencia de China por parte de las empresas alemanas.

Otros países occidentales también están promoviendo la mitigación de riesgos en medio de la preocupación por la actitud cada vez más asertiva de China hacia Taiwán y en el Mar de China Meridional, así como por el creciente control que ejerce sobre su economía nacional.

La economía china se enfrenta a una trayectoria descendente, según el 86% de las empresas alemanas consultadas en la encuesta del martes, aunque la mayoría considera que es temporal y prevé un repunte en los próximos 1 a 3 años.

La recuperación de China de la pandemia ha resultado más inestable de lo que muchos esperaban, con una crisis inmobiliaria cada vez más profunda, crecientes riesgos deflacionistas y una demanda tibia que ensombrecen las perspectivas para este año.

Un 54% de las empresas alemanas encuestadas declararon que, no obstante, tenían previsto aumentar la inversión para seguir siendo competitivas.

Fuente: Reuters