Boric da luz verde al régimen chino para explotar el litio chileno
La primera visita oficial del presidente chileno, Gabriel Boric, a China está satisfaciendo las aspiraciones imperialistas y expansionistas del régimen comunista liderado por Xi Jinping. Ambos líderes han firmado un contrato de explotación de litio chileno por valor de 250 millones de dólares.
La empresa beneficiaria de este acuerdo es el grupo chino Tsingshan, especializado en investigación y desarrollo, así como en la producción y venta de celdas de baterías de iones de litio aplicadas a sistemas de energía de vehículos eléctricos, incluidos camiones mineros eléctricos y otros equipos.
El presidente progresista Boric anunció este acuerdo como una «inversión significativa que generará cientos de empleos en el norte de nuestro país, especialmente en Mejillones», a través de su cuenta de X (ex Twitter).
Sin embargo, las aspiraciones de Tsingshan, una empresa con ingresos que superan los 54 mil millones de dólares y más de 85 mil empleados en todo el mundo, son aún más ambiciosas.
Una ambición a gran escala
El objetivo de Tsingshan, liderado por John Li, va más allá de la simple extracción de litio chileno, también conocido como «oro blanco»; sino que buscan su industrialización. Para lograrlo, planean invertir 2000 millones de dólares en el marco de la incipiente estrategia nacional de litio diseñada por Boric.
«Queremos establecer el mayor ecosistema verde de tecnología relacionada con el litio en Sudamérica, construyendo plantas de cátodos de litio, empaquetado de baterías y ensamblaje de vehículos eléctricos, configurando un parque industrial ecológico del litio con un puerto integrado, y aprovechando las sinergias con Argentina y Bolivia», explicó John Li en una entrevista con el Diario Financiero en febrero de este año.
A pesar de los planes ambiciosos, el régimen chino se enfrenta a obstáculos en su expansión económica. Este acuerdo entre Gabriel Boric y Xi Jinping puede interpretarse como una compensación para el régimen comunista, luego de que la justicia australiana suspendiera una polémica licitación que habría permitido a la empresa china BYD, una de las principales firmas de vehículos eléctricos, explorar y explotar litio en el salar de Maricunga durante 27 años, con opción a otros 29, bajo el volcán Ojos del Salado.
Respecto a Chile, los ambiciosos planes podrían enfrentar un obstáculo judicial. La Corte de Apelaciones de Copiapó admitió un recurso de protección presentado por el gobernador regional en defensa de la zona donde se encuentra el litio chileno. A la fecha, el acuerdo de 80.000 toneladas suscrito por Boric por 61.000 millones de dólares, a tan solo dos meses del fin del mandato de Sebastián Piñera, sigue en el limbo.
Corrupción Geoestratégica
La estrategia de China en Latinoamérica para asegurarse el suministro de litio no siempre sigue protocolos diplomáticos, sino que se basa en lo que se ha denominado «corrupción geoestratégica».
Esta táctica implica el soborno a autoridades locales para sortear los requisitos para invertir. Según un informe de la consultora especializada en crimen organizado transnacional, IBI Consultants, esta práctica permitió a China asegurar inversiones millonarias en el «triángulo de oro blanco» conformado por Chile, Bolivia y Argentina.