Bonos en efectivo y préstamos sin intereses: las promesas del gobierno de Ucrania para aumentar el reclutamiento juvenil
Recibirás un salario generoso, una prima extraordinaria y un préstamo sin intereses para comprar una vivienda. ¿El reto? Tendrás que luchar en el frente del conflicto más mortífero de Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Es difícil vendérselo a los jóvenes que tienen toda la vida por delante.
Dos meses después de que Ucrania lanzó una campaña nacional para reclutar jóvenes para luchar en sus cansadas y envejecidas fuerzas armadas durante un año, menos de 500 han firmado contratos, según Pavlo Palisa, asesor militar del presidente Volodymyr Zelenskiy.
Palisa enfatizó que el plan, que inicialmente estaba limitado a seis brigadas antes de expandirse a 24, estaba en sus primeras etapas. Hasta ahora, los números brindan un escaso respiro a las fuerzas de defensa de Ucrania, que son superadas en número por Rusia después de tres años de guerra que han matado y herido a cientos de miles.
Pavlo Broshkov, entre los pocos cientos de jóvenes que han aceptado la oferta hasta ahora, dijo que consideraba el servicio militar como su deber y quería ayudar a ahorrarle a su hija Polina, de seis meses, los horrores que él había enfrentado mientras crecía durante el conflicto.
«No quiero que mi hija siquiera escuche la palabra ‘guerra’ en el futuro», declaró el joven de 20 años, uno de los siete jóvenes reclutas entrevistados por Reuters que serán enviados a luchar en unidades de primera línea en unos dos meses.
«Simplemente no quiero que ella sepa lo que significa», indicó.
Como padre primerizo que sueña con comprar un apartamento para su familia, Broshkov también se sintió atraído por las condiciones financieras del programa de reclutamiento, que se lanzó en febrero y está dirigido a jóvenes de entre 18 y 24 años que estén preparados para desempeñar funciones de combate.
Además del acuerdo hipotecario, el paquete incluye un salario mensual de hasta 2.900 dólares, muy por encima del salario promedio nacional de unos 520 dólares, un bono en efectivo de 1 millón de grivnas (24.000 dólares) y una exención de movilización de un año después de un año de servicio.
La esposa de Broshkov, de 18 años, entiende la necesidad de defender el país, pero no puede dejar de angustiarse por el peligro.
«La muerte persigue ahora a mi marido y puede alcanzarlo en cualquier momento», lamentó Kristina Broshkova, quien regresó a casa de sus padres.
«El dinero es una motivación, pero morir por dinero realmente no vale la pena», añadió.
«TODAVÍA SON NIÑOS GRANDES»
Los jóvenes reclutas se están preparando para dirigirse al frente en un momento en que las fuerzas rusas continúan con sus ataques en múltiples frentes, incluso mientras la administración estadounidense del presidente Donald Trump busca un alto el fuego negociado.
Zelenskiy dijo en enero que Ucrania tenía 980.000 personas en armas, mientras que el año pasado el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó aumentar el tamaño de las fuerzas armadas rusas en 180.000 personas, a 1,5 millones de efectivos en servicio activo.
Tras la invasión rusa a gran escala de 2022, la mayoría de los hombres adultos fueron reclutados en Ucrania y el año pasado Kiev redujo de 27 a 25 años la edad requerida por ley para alistarse, en un intento de fortalecer sus fuerzas.
El plan de reclutamiento de jóvenes marca un cambio con respecto a la movilización forzada, que se vio obstaculizada por la desconfianza pública, y es parte de un esfuerzo más amplio para hacer que el ejército sea más profesional y sostenible, dicen los funcionarios.
La edad promedio de los soldados ucranianos en el campo de batalla es de 45 años, dijo a Reuters una fuente diplomática de alto nivel con conocimiento de las capacidades de defensa del país.
Serhii Filimonov, comandante del batallón Lobos Da Vinci, que presta servicio en el frente oriental de Pokrovsk, afirmó que muchos jóvenes motivados se habían alistado incluso antes de la campaña de reclutamiento. Por lo tanto, no esperaba que muchos jóvenes de entre 18 y 24 años se unieran al programa, y añadió que el dinero por sí solo no era motivación suficiente para luchar en una guerra.
«Tienes que luchar por tus amigos, por tu familia, por el futuro, no por un millón de grivnas», explicó.
Sin embargo, Oleksandr Moroz, instructor militar de una de las brigadas, dijo que la mayoría de los jóvenes que había entrenado se sintieron atraídos por los beneficios económicos, aunque describió el reclutamiento hasta la fecha como «una gota en el océano» en los intentos de reducir la edad promedio en el frente.
«En esta etapa, todavía son niños, niños grandes», añadió mientras los nuevos reclutas aprendían medicina táctica en un sitio de entrenamiento.
TIKTOK EN LA VIDA REAL
Además de sentirse atraídos por el dinero, los reclutas entrevistados por Reuters dijeron en diversas ocasiones que se unieron para defender su patria, tener un mayor control de su destino que simplemente ser reclutados y potencialmente forjar una carrera militar.
Si bien aún les quedan varias semanas de entrenamiento antes del despliegue, su primera experiencia con ataques simulados con artillería y drones fue un shock para algunos.
«Es como TikTok y la vida real: hay una gran diferencia. En el vídeo parece genial, fácil, pero en realidad no lo es», describió Zakhariy Shatko, un joven de 24 años que se unió al programa junto con su amigo Broshkov.
Mientras los instructores practicaban asaltos con drones, una de las principales amenazas en el campo de batalla, los dos amigos tuvieron un descanso para fumar. Cuando los instructores se enteran de tales infracciones, se asignan 100 flexiones para que toda la unidad practique la responsabilidad compartida.
Para Yuriy Bobryshev, de 18 años, la primera persona en unirse al programa, la motivación para luchar era personal.
Tras escapar de la ocupación rusa de Volnovakha, en la región de Donetsk, a los 15 años, lo atormentan los recuerdos de la violencia, así como la pérdida de su hermano, que murió allí.
«Vi demasiados cadáveres», dijo Bobryshev. «En cuanto me fui, quise ir a luchar».
Reuters
