Bolsonaro y Lula se enfrentaron por primera vez en un picante debate presidencial
El presidente Jair Bolsonaro y el exmandatario Luiz Inacio Lula da Silva se enfrentaron por primera vez cara a cara este domingo 28 de agosto en el primer encuentro televisivo de la campaña electoral en Brasil, en un debate marcado por tensión y acusaciones cruzadas.
Organizado por un conjunto de medios brasileños, entre ellos la Rede Bandeirantes y el periódico Folha de S. Paulo, el debate fue el primero del calendario. Las elecciones brasileñas tendrán lugar el próximo 2 de octubre y la mayoría de las encuestas lo colocan a Lula como favorito.
Los enfrentamientos entre ambos candidatos en el debate también involucraron a los otros cuatro candidatos presentes en el debate: Felipe D’Avila del Partido Novo, Simone Tebet del Partido del Movimiento Democrático Brasileño, Soraya Thronicke del Partido Unión Brasilera y Ciro Gomes del Partido Democrático Laborista.
El primer cruce entre el mandatario y Lula ocurrió cuando Bolsonaro acusó al izquierdista de haber liderado el gobierno “más corrupto en la historia de Brasil”, una acusación a la que el candidato del Partido de los Trabajadores (PT) respondió enumerando medidas que se llevaron adelante durante su gestión, entre ellas los planes de inclusión social, políticas para promover la educación y la generación de empleo.
“Todo el mundo robaba, desviaba, y el presidente no sabía”, comentó, irónicamente Bolsonaro, refiriéndose al caso de Petrobras.
Otro momento tenso fue cuando el actual mandatario recordó los dichos de Lula de la semana anterior cuando dijo que «menos mal» que «la naturaleza había creado el «monstruo» coronavirus para mostrar la importancia de un Estado fuerte en la resolución de este tipo de crisis, frase que generó polémica y por la cual Lula tuvo que salir a disculparse.
Asimismo, Bolsonaro cuestionó sobre qué moral tiene para hablar de él, luego de haber estado preso por casos probados de corrupción. Lula estuvo preso durante 580 días por corrupción y fue liberado en noviembre de 2019 gracias a la Corte Suprema de Brasil, quien tiene principalmente corriente ideológica de izquierda, ya que la mayoría de los fueron nombrados por Lula cuando era presidente.
Por su parte, Lula acusó a Bolsonaro de no «derramar una sola lágrima» por los fallecidos por el coronavirus y lo cuestionó por el «negacionismo» con la vacuna, mientras que Tebet respaldó al expresidente y dijo que hubo corrupción en el Ministerio de Salud del actual presidente para adquirir anticipadamente en un «paraíso fiscal» la vacuna india Covaxin.
Los expertos vaticinan que los próximos comicios podrían ser los más polarizados desde el regreso a la democracia en 1985. Muchos definen esta polarización entre dos corrientes totalmente opuestas: el progresismo vs el conservadurismo y las agendas de ambos candidatos están claras en este sentido.
LEE TAMBIÉN: Nueva encuesta de consultora imparcial perfila a Bolsonaro como ganador en las elecciones brasileñas
«Elecciones transparentes»
Luego de los resultados de las elecciones presidenciales de EE. UU. en 2020 y de las acusaciones de fraude electoral en varios estados, Bolsonaro hizo un importante esfuerzo el año pasado para impulsar en el Congreso una ley de “Voto Impreso Auditable”, pero no logró que esta se apruebe.
A pesar de contar con el apoyo del pueblo, el presidente tiene mucha resistencia de la izquierda y de la Corte Suprema, en su mayoría opositora.
Sabiendo que tiene toda una maquinaria de propaganda y casi todo el espectro político en su contra, el líder conservador busca unas elecciones transparentes, por lo que recientemente hizo un llamado a las fuerzas militares a «defender el país».