Biden apunta a conquistar a los republicanos que no apoyan a Trump

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está haciendo campaña para su reelección ante los republicanos que no apoyan al abanderado de su partido, Donald Trump, en las elecciones de noviembre, dijo el jueves un funcionario de campaña de Biden.

La campaña del presidente demócrata contrató a un director nacional de participación republicana: Austin Weatherford, quien fue jefe de gabinete del excongresista republicano Adam Kinzinger.

Kizinger es un crítico abierto de Trump, quien, junto con su colega representante Liz Cheney, fueron los únicos dos republicanos que se unieron al comité selecto de la Cámara de Representantes del 6 de enero que investigó los incidentes en el Capitolio de EE.UU..

Weatherford ha sido contratado «para encabezar los esfuerzos de acercamiento a los independientes y republicanos moderados que saben el peligro que representa Donald Trump para el país si es reelegido para un segundo mandato», dijo la fuente de la campaña demócrata.

Biden y Trump se encuentran en una revancha por la Casa Blanca más reñida que en 2020, según una encuesta de Reuters/Ipsos. El análisis encontró que el apoyo a Biden entre los votantes sin un título de cuatro años ha disminuido 10 puntos porcentuales con respecto al mismo período en 2020.

La mayoría de las encuestas de opinión nacionales muestran un empate.

Trump a menudo ha calificado a los miembros de su partido que no se alinean detrás de él como «RINO», por «Republicanos Solo de Nombre», por miembros del partido que considera desleales. La campaña del expresidente no respondió a una solicitud de comentarios.

Tanto la campaña de Biden como la de Trump se apresuraron a cortejar a los partidarios de la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, quien abandonó las primarias del GOP en marzo. Haley no respaldó al candidato republicano en ese momento, pero desde entonces dijo que votaría por él.

La campaña demócrata ha celebrado reuniones con los votantes de Haley y ha invertido en una «compra de publicidad de siete cifras» dirigida a dichos votantes, dijo el funcionario de campaña de Biden. Hay pocos precedentes de que un gran número de republicanos respalden a un demócrata en una elección presidencial.

Mientras tanto, Trump está recaudando fondos en el liberal San Francisco, con la esperanza de atraer dinero de capital de riesgo de aquellos que se sienten desanimados por las políticas liberales de Biden.