Autoridades confirman que víctimas tras colapso del puente en Baltimore son trabajadores latinos
El derrumbe del puente en Baltimore tras el impacto de un buque carguero dejó seis desaparecidos, entre los que se incluyen migrantes de México, Guatemala, Honduras y El Salvador.
Las autoridades norteamericanas dieron por muertos a los seis trabajadores desaparecidos que participaban en obras en el puente Francis Scott Key, estructura que colapsó luego de ser impactado por el barco Dali la madrugada del martes.
Ocho personas cayeron al río Patapsco, de las cuales dos pudieron ser rescatadas, una en estado grave. Sin embargo, los seis restantes no han podido ser hallados.
La Cancillería de México informó a través de sus redes sociales que entre los desaparecidos se hallan personas mexicanas, guatemaltecas y salvadoreñas.
En tanto, desde Guatemala indicaron que dos guatemaltecos, de 26 y 35 años, originarios de San Luis, Petén y Camotán, Chiquimula, respectivamente, están entre quienes no han podido ser encontrados tras el derrumbe.
“Los guatemaltecos fueron parte de un total de ocho trabajadores que se encontraban reparando el asfalto sobre el puente en el momento del siniestro”, agregó el ministerio de Exteriores de Guatemala.
“Dentro de los seis trabajadores que aún se encuentran desaparecidos, se cree que hay personas de origen mexicano, de Honduras, El Salvador y los dos guatemaltecos. Todos trabajaban para una compañía que confirmó el suceso al Departamento de Tránsito de Maryland”, agregó.
Por su parte, la Secretaría de Relaciones Exteriores de Honduras confirmó la muerte del migrante hondureño Maynor Suazo en el accidente.
De acuerdo al vicecanciller del país centroamericano, Antonio García, Suazo cumplía su turno de noche en el puente, donde “el accidente la sorprendió”, según detalla Agencia EFE.
A su vez, indicó que el Gobierno de Xiomara Castro se contactó con la familia de Suazo en Honduras, añadiendo que hay disposición oficial de repatriar sus restos, si así lo deciden sus familiares.
Suazo, de 39 años, era originario de Azacualpa, departamento de Santa Bárbara, en el oeste de Honduras, y llevaba 18 años viviendo en Estados Unidos, señaló García.
Por su parte, medios norteamericanos como NBC4 Washington detallan que otro de los desaparecidos es Miguel Luna, empleado de 49 años que habría estado trabajando la noche del lunes en el puente cuando la estructura colapsó. Su esposa, María del Carmen Castellón, confirmó que es de origen salvadoreño.
Buzos de rescate continúan con las labores de búsqueda en el río de los cuerpos mientras la presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, en inglés), Jennifer Hemendy, ratificó que la caja negra del barco ya fue trasladada a Washington para su análisis.