Aumentan los casos de neumonía infantil en China: lo que sabemos hasta ahora
Informes recientes indican un aumento de los casos de neumonía en China, que afectan sobre todo a niños a partir de cinco años. Este hecho ha suscitado inquietud e investigaciones -incluso por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS)- sobre posibles nuevos patógenos y la posibilidad de que se propaguen más allá de las fronteras chinas.
En varios centros médicos pediátricos del norte de China se han registrado casos de neumonía causada por micoplasma, que ha afectado sobre todo a niños de guarderías y escuelas primarias. Sin embargo, las autoridades chinas atribuyeron el repunte a «patógenos conocidos» y afirmaron que la prevalencia de cepas más comunes como la gripe, el adenovirus y el virus respiratorio sincitial ha superado a la del micoplasma entre los pacientes.
Pero los epidemiólogos señalan que la elevada incidencia de casos de neumonía en el país es inusual. Por el contrario, cuando otros países relajaron las restricciones de COVID-19, fueron sobre todo la gripe y las cepas más leves del virus respiratorio sincitial (VRS) las que provocaron un aumento de las enfermedades respiratorias.
La neumonía puede ser una enfermedad potencialmente mortal caracterizada por infección e inflamación pulmonar. Puede estar provocada por diversos agentes patógenos, como virus, bacterias o incluso hongos, que pueden hacer que los pulmones se llenen de pus o líquido. También se propaga a través de gotitas respiratorias por la tos o los estornudos de una persona infectada.
Estadísticas confusas
Tras consultar a Beijing, la OMS determinó que no había «patógenos inusuales o novedosos» en los casos de neumonía relacionados con niños de la capital del país. Sin embargo, en las zonas vecinas de Tianjin y Shanghai, conocidas por ser el principal centro financiero y comercial de China, se registraron picos en las tasas de micoplasma y otras infecciones respiratorias, informa Bloomberg.
El aumento de los casos provocó una oleada de padres preocupados que llevaron corriendo a sus hijos a los hospitales, que están «desbordados de niños enfermos», informa la NBC. Las imágenes que circulan por las redes sociales muestran pasillos de hospitales abarrotados y niños recibiendo tratamientos intravenosos, mientras algunos padres piden el cierre de las escuelas para frenar la propagación de la infección.
Emma Wang, cuya hija de 7 años contrajo neumonía por micoplasma, declaró a NBC News que el hospital al que acudieron en Beijing estaba «muy abarrotado» y que el tiempo de espera para ver a un médico era de «dos o tres horas».
En la provincia oriental de Zhejiang, varios niños enfermaron de micoplasma y otras enfermedades, lo que obligó a varios distritos escolares a suspender las clases presenciales hasta nuevo aviso. El brote también ha provocado un aumento del uso de mascarillas en el transporte público y en espacios cerrados de grandes metrópolis como Beijing y Tianjin.
“Una gran ola”
«El hecho de que solo los niños estén afectados sugiere que lo más probable es que se trate de un patógeno ya existente», afirmó Jin Dong-yan, especialista en virología de la Universidad de Hong Kong. Del mismo modo, Francois Balloux, del Instituto de Genética del University College de Londres, declaró a la BBC que cree que los casos se intensificarán a medida que nos adentremos en los meses más fríos del invierno. «Es probable que China esté experimentando ahora una importante oleada de infecciones respiratorias infantiles, ya que éste es el primer invierno tras su prolongado bloqueo».
Durante más de dos años, China aplicó algunas de las medidas de control de virus más rigurosas del mundo. Pero las estrictas políticas, que incluían cierres prolongados de ciudades, pruebas masivas y estrictos controles fronterizos, pueden haber tenido consecuencias imprevistas, señalan los expertos. El prolongado periodo de exposición reducida a diversos patógenos podría haber afectado a la capacidad de la población general para desarrollar y mantener la inmunidad contra otros virus comunes.
Como resultado, cuando se relajaron las restricciones, la población china -especialmente los niños- puede haber sido más susceptible a las infecciones comunes, lo que podría estar contribuyendo al aumento de los casos de neumonía.
A pedido de la OMS, la agencia estatal china de noticias Xinhua publicó un artículo citando a funcionarios de la Comisión Nacional de Salud (CNS). En el comunicado se afirmaba que los funcionarios sanitarios estaban «comprometidos a vigilar de cerca y abordar» el diagnóstico y tratamiento de los niños que padecen enfermedades respiratorias.
Pero la OMS también señaló que desde octubre se ha producido un marcado «aumento de las enfermedades similares a la gripe» en el norte de China, más pronunciado que en los tres años anteriores. «Algunos de estos aumentos se producen antes en la temporada de lo que se ha experimentado históricamente», rezaba el comunicado.
Además, los investigadores han expresado su preocupación por la «elevada resistencia local» de China a los macrólidos, los antibióticos utilizados para tratar las infecciones por micoplasma. «El país tiene la tasa más alta del mundo de resistencia a un tipo de antibióticos llamados macrólidos», declaró a Bloomberg Airfinity Ltd., una empresa de inteligencia sanitaria y análisis de datos con sede en Londres.
La situación refleja los patrones globales en un mundo post-COVID, con repuntes de gripe y VSR registrados en más de 23 países, señaló la empresa. En Dinamarca, Suecia y Singapur se ha observado un aumento de los casos de micoplasma. La empresa también advirtió de un posible brote en Taiwán a principios del próximo año, dados los «frecuentes intercambios» con China continental.
Por: Alina Wang