Ashwagandha: alivio natural del estrés de la antigua India

Ashwagandha (Withania somnifera) es un arbusto de hoja perenne de la familia de las solanáceas (Solanacea) que se ha utilizado en la medicina ayurvédica durante más de 3000 años. 

La planta produce bayas medicinales, conocidas popularmente como «cereza de invierno», y sus raíces se conocen como «ginseng indio». El nombre en sánscrito se refiere al potente olor de la raíz (gandha) a caballo (ashwa), e insinúa su supuesta capacidad para imbuir a uno con el vigor y la fuerza de un caballo.

Los suplementos de ashwagandha han ganado popularidad recientemente entre las celebridades y los entusiastas de la salud para ayudar a mantener el bienestar general.  

Uso tradicional

Ayurveda clasifica a la ashwagandha como «Rasayana», una de un grupo selecto de hierbas revitalizantes destinadas a apoyar el bienestar físico y mental, curar enfermedades y prolongar la vida. Históricamente se ha utilizado para tratar una amplia gama de enfermedades, incluidas la artritis reumatoide, la epilepsia, la diabetes, los trastornos de la piel, el agotamiento y el estrés.

Las cualidades adaptógenas de la ashwagandha son especialmente notables. Los adaptógenos son sustancias naturales que apoyan la capacidad del cuerpo para adaptarse al estrés y restaurar la normalidad de las funciones internas. Ashwagandha se ha vuelto cada vez más popular hoy en día, ya que las personas buscan soluciones totalmente naturales para reducir el estrés y mejorar su bienestar general.

Propiedades curativas de la ashwagandha

La raíz de ashwagandha se usa para tratar diversas afecciones, como reumatismo, leucoderma, estreñimiento, insomnio, crisis nerviosa, bocio y afecciones ‘vata’ viciadas. Considerado seguro para todas las edades, los niños suelen tomar un tónico combinado con leche. También se cree que ashwagandha ayuda a retardar los efectos del envejecimiento. 

Cuando se combina con otros remedios, la raíz de ashwagandha también puede tratar eficazmente las picaduras de escorpión y el veneno de serpiente.

Como muchas hierbas, toda la planta (incluidas sus hojas, flores y semillas) tiene valor medicinal.  

• Las hojas de sabor amargo ayudan a reducir la fiebre y la incómoda hinchazón. 
• Las flores son astringentes, diuréticas, afrodisíacas y depurativas. 
• Las semillas son antihelmínticas (pueden eliminar gusanos parásitos). Combinados con un astringente y sal de roca, se utilizan para eliminar las manchas blancas de la córnea, aliviar la histeria y la ansiedad y aumentar el recuento de espermatozoides.

Ashwagandha contiene varios compuestos bioactivos, como withanólidos, alcaloides y saponinas a los que se les atribuyen muchas de las propiedades farmacológicas de la hierba.

Uno de los principales withanólidos, la withaferina A, ha demostrado importantes cualidades antioxidantes, antitumorales y antiinflamatorias. La variada composición química de ashwagandha le permite afectar muchos sistemas corporales, proporcionando una multitud de ventajas medicinales.

Beneficios para la salud de la ashwagandha

Reducción de la tensión y la ansiedad

Las investigaciones han demostrado que la ashwagandha es eficaz para reducir los niveles de tensión y ansiedad. La planta parece modular el eje hipotalámico-pituitario-suprarrenal (HPA), reduciendo así los niveles de cortisol. Para quienes sufren mucho estrés crónico, el extracto de raíz de ashwagandha puede reducir drásticamente los niveles de estrés y mejorar la calidad de vida.

Capacidades cognitivas mejoradas

Se ha descubierto que la ashwagandha mejora la memoria y la función cognitiva debido a sus propiedades antioxidantes y a la protección de las células nerviosas del daño oxidativo.

Propiedades antioxidantes y antiinflamatorias

Las poderosas propiedades antiinflamatorias y antioxidantes presentes en la ashwagandha ayudan a reducir la proteína C reactiva (PCR) y otros marcadores inflamatorios al tiempo que aumentan la actividad de dos enzimas antioxidantes naturales. Este fenómeno ayuda a mitigar la inflamación crónica y el estrés oxidativo que pueden provocar enfermedades crónicas.

Mejora la salud reproductiva

Ashwagandha se ha utilizado en la medicina tradicional para mejorar la fertilidad y la salud reproductiva, que se ven afectadas negativamente por el estrés. Al aliviar el estrés, este adaptógeno ayuda a promover el equilibrio hormonal en las mujeres y a mejorar la calidad y la motilidad del esperma en los hombres.

Los científicos están explorando y ampliando la amplia gama de usos tradicionales de esta hierba, y la investigación contemporánea revela beneficios en las áreas mencionadas anteriormente, así como en la regulación del azúcar en sangre, la función tiroidea y el rendimiento físico. 

Usando ashwagandha

Los beneficios de la ashwagandha se pueden amplificar combinándola con otros adaptógenos como la albahaca santa o la rodiola. Por supuesto, mantener una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad, además de dormir lo suficiente, también mejorará la eficacia de la ashwagandha.

Los amplios beneficios de la ashwagandha la convierten en una valiosa adición a las prácticas de salud tanto preventivas como terapéuticas. Puede incorporarse fácilmente a su rutina diaria a través de cápsulas, polvos, gomitas, extractos líquidos o tés, todos los cuales están disponibles comercialmente.

La ashwagandha generalmente se considera segura y los efectos secundarios son raros; pero se recomienda elegir productos de fuentes acreditadas para garantizar la pureza y la potencia.

Si cree que el estrés está afectando su salud, la ashwagandha es un adaptógeno flexible y potente que vale la pena considerar como parte de su enfoque holístico hacia el bienestar.