Argentina registra su inflación más baja en cinco años

Argentina alcanzó en mayo de 2025 una inflación mensual del 1,5%, la más baja en los últimos cinco años, según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Este registro, que coincide con el nivel observado en mayo de 2020 durante el inicio de la pandemia, refleja una desaceleración sostenida de los precios, consolidando una tendencia descendente que comenzó a finales de 2023. La inflación interanual se situó en un 43,5%, marcando la decimotercera caída consecutiva, mientras que el acumulado de los primeros cinco meses del año alcanzó un 13,3%.
Un logro en medio de la estabilización económica
El dato de mayo, que superó las expectativas de consultoras privadas que proyectaban un índice cercano al 2%, evidencia los resultados de las políticas económicas implementadas por el gobierno de Javier Milei.
Desde el Ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, se destacó que este logro se alcanzó «sin cepo cambiario, corrigiendo precios relativos y con una economía creciendo al 6% anual».
Por su parte, el presidente Milei celebró el resultado, afirmando que «la inflación en Argentina será un hecho del pasado» para 2026, en línea con proyecciones del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, que anticipa un IPC anual del 28,6% para 2025 y un 15% para 2026.
El informe del Indec detalla que las categorías con menores variaciones en mayo fueron Alimentos y bebidas no alcohólicas (0,5%) y Transporte (0,4%), impulsadas por una caída en los precios de frutas y verduras estacionales. Por otro lado, los sectores de Comunicación (4,1%) y Restaurantes y hoteles (3%) registraron los mayores incrementos, influenciados por alzas en servicios de telefonía, internet y consumo fuera del hogar.
Factores detrás de la desaceleración
La baja inflación responde a una combinación de factores, incluyendo la estabilidad cambiaria, la moderación en los precios de la carne y la ausencia de ajustes significativos en tarifas de servicios públicos durante mayo. Además, el levantamiento del cepo cambiario en abril, una medida histórica tras casi 15 años de restricciones, ha contribuido a reducir distorsiones en el mercado y fomentar la confianza en la economía. El Fondo Monetario Internacional (FMI) respaldó estas medidas, destacando los esfuerzos del gobierno por consolidar la desinflación y fortalecer las reservas del Banco Central.
Sin embargo, el Centro de Estudios para la Producción y el Análisis (CEPA) advierte que esta desaceleración también refleja un consumo estancado y topes en aumentos salariales, de combustibles y medicamentos, lo que podría limitar la recuperación del poder adquisitivo. A pesar de estas críticas, las proyecciones del mercado son optimistas, con estimaciones que sugieren que la inflación mensual no superará el 2% en lo que resta de 2025.
Por su parte, el Ministerio de Economía señala que el crecimiento económico (+6,4% acumulado entre abril y noviembre de 2024) y los incrementos reales en salarios y jubilaciones desde diciembre de 2024 son señales de una recuperación en marcha.
Analistas del REM proyectan que, de mantenerse esta trayectoria, Argentina podría cerrar 2027 con una inflación de un dígito (10%), un nivel no visto desde 2006. Este panorama, combinado con un crecimiento proyectado del Producto Bruto Interno (PBI) de 4,5% en 2025, 3,7% en 2026 y 3% en 2027, refuerza la percepción de que el país está transitando hacia una estabilización económica sostenible.
Un camino hacia la estabilidad
El dato de mayo de 2025 no solo representa un logro económico, sino también un respaldo a las políticas de ajuste fiscal, monetario y cambiario impulsadas por el gobierno de Milei. Sin embargo, el desafío persiste en traducir esta desaceleración inflacionaria en una mejora tangible para la población, especialmente para los sectores más vulnerables. Mientras el gobierno celebra este «doble récord» como el menor índice en cinco años y en la era Milei, la ciudadanía espera que los beneficios de la estabilidad económica lleguen pronto a sus bolsillos.