Jueza argentina ordena el arresto de Diosdado Cabello si ingresa al país, por causa de narcotráfico
El ilegítimo presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Diosdado Cabello Rondón, podría ser detenido si ingresa a Argentina, luego que la justicia de ese país ordenara su detención para extraditarlo a Estados Unidos.
La orden de detención fue impartida por la jueza María Alejandra Giménez, de la provincia de Jujuy —territorio que colinda con Bolivia— como una respuesta a la petición de un Juzgado Federal para el distrito Sur de Nueva York, en una causa por presunto narcotráfico, según Clarín.
Previamente, la Embajada de Estados Unidos emitió un exhorto que llegó a manos de la jurista el cual indica que la orden de detención de Cabello es con fines de extradición.
“Se tiene conocimiento, y así fue informado, que (Diosdado Cabello) viajaría a la República Argentina aproximadamente el día 11 de marzo de 2022, y que ingresaría al territorio por Jujuy”, dice el exhorto, según Clarín citando fuentes consultadas.
El pasado viernes, la jueza ordenó a la Policía Federal Argentina, a la Gendarmería Nacional, a la Policía de Seguridad Aeroportuaria y Policía de la Provincia de Jujuy, la detención de Cabello si éste lograra entrar al país desde Bolivia.
Bolivia, cuyo presidente Luis Arce pertenece al partido socialista de Evo Morales, es aliado de la tiranía chavista.
Asimismo, el general retirado Cabello, es el número dos del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), y es socio político de Nicolás Maduro que es un estrecho aliado de la vicepresidenta argentina Cristina Kirchner.
Acusaciones contra Diosdado Cabello
Cabello está siendo buscado por la causa “S2 11 Cr. 205(AHK)” que impulsa el fiscal estadounidense Geoffrey Berman.
Según el Departamento de Estado de Estados Unidos, Cabello participó en una conspiración narcoterrorista corrupta y violenta entre el Cartel de los Soles, una organización venezolana de narcotraficantes compuesta por altos funcionarios venezolanos, y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), una Organización Terrorista Extranjera.
Asimismo, Cabello coordinó con las FARC para promover la conspiración narcoterrorista con el fin de transportar y distribuir grandes cargamentos de cocaína y beneficiarse de la provisión de seguridad fuertemente armada para proteger los cargamentos de cocaína y hacer que otros participaran en ello.
Por medio de esta conspiración, lograron que grandes cantidades de cocaína previamente incautada se vendieran a los narcotraficantes a cambio de millones de dólares.
Además, en su conspiración narcoterrorista lograron interferir en las investigaciones sobre tráfico de drogas y en las causas penales pendientes en Venezuela y en otros lugares, también ayudó a proporcionar a las FARC armas de uso militar, incluidas ametralladoras, municiones, lanzacohetes y equipos de explosivos.
La justicia estadounidense lo acusa de tres cargos.
De acuerdo con el Departamento de Estado de EE. UU., el 5 de marzo de 2020, Cabello fue acusado por un tribunal federal del Distrito Sur de Nueva York de conspiración para cometer narcoterrorismo, conspiración para importar cocaína y cargos asociados de armas de fuego en violación del Título 21 del Código de los Estados Unidos, Secciones 960a y 963, y del Título 18 del Código de los Estados Unidos, Secciones 924 y 2.
Se le acusa de haber transportado entre 200 y 250 toneladas de cocaína a ese país, como parte del Cártel de los Soles de México.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos está ofreciendo una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que conduzca al arresto y/o condena de Diosdado Cabello Rondón.
En la misma causa de Diosdado Cabello está acusado Nicolás Maduro por gestionar y dirigir el Cartel de los Soles.
Como miembro del Cartel y por su cargo en el gobierno, Maduro negoció envíos de varias toneladas de cocaína producida por las FARC.
Durante su mandato como ministro de Asuntos Exteriores coordinó las relaciones exteriores con Honduras y otros países para facilitar el tráfico de drogas a gran escala; y solicitó ayuda a los dirigentes de las FARC para entrenar a un grupo de milicias que funcionaban, como una unidad de las fuerzas armadas del Cártel de los Soles, según el Departamento de Estado.
De acuerdo con la acusación federal, desde al menos en (o alrededor de 1999), hasta alrededor de 2020, Nicolás Maduro Moros, Hugo Armando Carvajal Barrios, alias «El Pollo», Cliver Antonio Alcalá Cordones, Luciano Marin Arango, alias «Iván Márquez», y Seuxis Paucis Hernandez Solarte, alias «Jesfis Santrich», “los acusados”, participaron en una corrupta y violenta conspiración narcoterrorista entre el Cartel de Los Soles de Venezuela y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia («FARC»).
Otros miembros del Cártel de los Soles acusados por narcotráfico:
Jesús Alfredo Itriago, (2) antiguo jefe de la lucha contra el narcotráfico del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en Venezuela.
Rodolfo McTurk-Mora, antiguo jefe de Interpol en Venezuela.
Cliver Antonio Alcalá Cordones, ex general de división del Ejército venezolano, dado de baja el 5 de julio de 2013. Anteriormente fue Comandante de la región Amazonas/Bolívar/Delta Amacuro y Comandante de la Cuarta División (región Maracay) entre 2010 y 2012.
Pedro Luis Martín-Olivares, antiguo Jefe de Inteligencia Económica del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) en Venezuela.
Hugo Armando Carvajal Barrios, fue director de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) de Venezuela y ex político venezolano. Carvajal Barrios fue nombrado director en 2004 y ocupó ese cargo hasta 2011, y de nuevo entre abril de 2013 y enero de 2014. En enero de 2016, Carvajal Barrios fue elegido miembro de la Asamblea Nacional de Venezuela como representante del Estado de Monagas. Carvajal Barrios, como líder y gestor del Cártel de los Soles, participó en la conspiración narcoterrorista corrupta y violenta con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Tareck Zaidan El Aissami Maddah, es el ex vicepresidente ejecutivo de Venezuela y más recientemente se desempeña como ministro de Industria y Producción Nacional en el régimen ilegítimo de Maduro. Anteriormente fue gobernador del estado venezolano de Aragua de 2012 a 2017, así como ministro de Interior y Justicia de Venezuela a partir de 2008. El Aissami facilitó los envíos de narcóticos desde Venezuela, incluyendo el control de los aviones que salían de una base aérea venezolana y las rutas de la droga a través de los puertos de Venezuela. En sus cargos anteriores, supervisó o fue propietario parcial de envíos de estupefacientes de más de 1.000 kilogramos procedentes de Venezuela en múltiples ocasiones, incluidos los que tenían como destinos finales México y Estados Unidos.