Los abortos en Texas se reducen un 60 % tras el primer mes de la ley Latidos del corazón
Los abortos en Texas, Estados Unidos, se redujeron significativamente en el primer mes de aplicación de la Ley de latidos del corazón.
En el mes de septiembre de 2021 se realizaron a 2.197 abortos, mientras en agosto el número fue de 5.404, lo que representa una drástica reducción de un 60 %, según un informe publicado por La Comisión de Salud y Servicios Humanos de Texas (HHSC), el 1 de febrero.
Los abortos en 2021 alcanzaron su punto más alto en marzo, cuando la ley se presentó por primera vez como proyecto de ley, y luego en un cercano segundo lugar en agosto, justo antes de que entrara en vigor, el 1 de septiembre.
En septiembre solo se practicaron dos procedimientos a mujeres que habían avanzado más de 8 semanas desde el momento de la fecundación.
En cada uno de los meses anteriores de 2021, los niños no nacidos con más de 8 semanas de gestación representaron más de 700 abortos, según The Texan News.
Los abortos también se redujeron entre todos los grupos raciales, y entre todos los grupos de edad, con la mayor disminución entre los blancos y los que tienen entre 19 y 25 años.
El 1 de febrero la HHSC habia confirmado que la prohibición del aborto en el Estado estaba salvando a 90 bebés del aborto cada día, que hasta esa fecha se habian salvado 13.860 bebés de los abortos.
Estos datos se darán mensualmente.
La nueva ley provida de latidos del corazón de Texas (SB 8) fue aprobada a principios de 2021.
Prohíbe los abortos una vez que se pueda detectar actividad cardíaca en el útero de un niño no nacido, a menos que exista una emergencia médica. No hay excepción para los embarazos debidos a incesto o violación.
La ley prohíbe, asimismo, a los funcionarios o agencias gubernamentales su aplicación. Sin embargo, autoriza a los ciudadanos a demandar a cualquier persona, además de la propia madre, que realice o ayude a realizar un aborto tras la presencia del latido del corazón.
Había sido bloqueada previamente por un tribunal inferior el 6 de octubre de 2021 que dictó una medida cautelar contra la ley.
También el Departamento de Justicia demandó al estado de Texas por la ley a principios de septiembre, acusando a ese Estado de promulgar la ley del latido del corazón “en abierto desafío a la Constitución”.
Por su parte, el gobernador de Texas, Greg Abbot, declaró que la S.B 8 tiene como objetivo proteger “la vida de todos los niños con latido del corazón de los estragos del aborto”.
Litigios pendientes
Whole Woman’s Health (v. Jackson), interpuso una demanda para anular la nueva ley de Texas, alegando que viola el caso Roe contra Wade (1973, y el caso Planned Parenthood contra Casey en 1992), en el que el Tribunal Supremo reconoció un “derecho constitucionalmente protegido” a obtener un aborto antes de que el feto sea viable, en torno a la semana 24.
El caso, conocido como Dobbs v. la Organización de Salud de la Mujer de Jackson, podría ser un caso histórico en la cuestión del aborto, ya que es la primera vez que el Tribunal se pronunciará sobre la constitucionalidad de una prohibición del aborto antes de la viabilidad desde Roe.
El Tribunal tiene la oportunidad de anular o modificar la actual jurisprudencia sobre el aborto de forma significativa.
La ley en cuestión prohíbe los abortos después de las 15 semanas, y sus defensores argumentaron ante el Tribunal Supremo que el tribunal debe corregir el “error atroz” que cometió en las decisiones de Roe v. Wade y Casey v. Planned Parenthood, que codificaron el aborto como un derecho constitucional, y que debe ser cada estado individual el que decida la legalidad del aborto, no el Gobierno federal, de acuerdo con El American.
El Tribunal Supremo escuchó los argumentos orales del caso el 1 de noviembre de 2021.
El tribunal se negó a suspender la ley. En este momento, se encuentra en el Tribunal Supremo de Texas, pero no hay un calendario para que se ocupe del caso.
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Por otra parte, recientemente, el nuevo fiscal general de Virginia, Jason Miyares, instó al Tribunal Supremo a que anule su sentencia de 49 años en el caso Roe contra Wade, y devuelva la regulación del aborto a los estados.
Miyares, que tomó posesión de su cargo a principios de este mes de enero de 2022, envió una carta al tribunal para informar que había cambiado la posición de la oficina en el caso conocido como Dobbs.
«El propósito de esta carta es notificar al tribunal que Virginia ya no se adhiere a los argumentos contenidos en su escrito presentado anteriormente. Virginia opina ahora que la Constitución no se pronuncia sobre la cuestión del aborto y que, por tanto, corresponde a los ciudadanos de los distintos estados determinar la situación jurídica y el tratamiento normativo del aborto.»
Asimismo mencionó que Virginia adopta ahora la postura de que los casos Roe y Casey se «decidieron erróneamente», y está de acuerdo con la disidencia del juez Clarence Thomas en el caso June Medical Services v. Russo (2020), que afirma que esas «decisiones crearon el derecho al aborto de la nada, sin una pizca de apoyo en el texto de la Constitución», y que el «desarraigo del derecho al aborto ha hecho inviable la jurisprudencia de este tribunal sobre el aborto.»
«Este tribunal debería restablecer la neutralidad judicial en el debate sobre el aborto permitiendo a los ciudadanos de los distintos estados resolver estas cuestiones por sí mismos», dice la carta de Miyares.