5 pasos para limpiar las chaquetas
Cuando llega la primavera, también llega el momento de lavar y guardar la ropa de invierno. Pero algunas prendas de invierno pueden dañarse con la limpieza en seco. Las chaquetas de plumón, por ejemplo, están aisladas con las suaves y cálidas plumas de los patos o gansos. Estas plumas pueden volverse quebradizas, romperse y caerse de las costuras si se exponen a los productos químicos utilizados en la limpieza en seco. Afortunadamente, no es difícil lavarlos usted mismo. Estos cinco pasos mantendrán su abrigo favorito funcionando durante años.
1. Remojar
En una tina grande de agua tibia, agregue una pequeña cantidad de detergente suave (como Woolite) y sumerja la chaqueta durante aproximadamente quince minutos. Para deshacerse de los olores o las manchas, agregue una cucharada de vinagre blanco a su remojo. Tras remojar, cepille suavemente cualquier punto sucio con un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dientes para no dañar la tela. No frote con las manos.
2. Enjuague
Después de cepillar las manchas, sumerja la chaqueta de plumas en una tina con agua limpia y fría y presione la espuma con ambas manos. Drene el agua jabonosa y vuelva a llenar la tina con agua limpia y vuelva a presionar la espuma para que salga. Repita este proceso de enjuague hasta que no quede espuma.
3. Secado
Después de enjuagar el detergente, exprima suavemente el exceso de agua de las mangas y el cuerpo de la chaqueta sin escurrirlo. Siga haciendo esto hasta que el abrigo ya no esté mojado. Presiónelo entre dos toallas para absorber el exceso de agua. Luego coloque la prenda en la secadora a fuego lento, agregando cuatro pelotas de secadora o pelotas de tenis para esponjar las plumas mientras se seca. Tardará de dos a tres horas en secarse completamente, dependiendo del peso del abrigo.
4. Pelusa
Saque la chaqueta de la secadora cada treinta minutos y pásela con las manos. La prenda estará seca cuando esté uniformemente esponjosa y sin grumos. Para el toque final, coloque la chaqueta de plumas sobre una cama y déle unos golpecitos suaves con una percha. Recuerde palmear suavemente todas las partes de la chaqueta.
5. Tienda
Lo mejor es colgar la chaqueta limpia sin comprimir. Si la presiona en una bolsa de ropa o una envoltura de plástico, la chaqueta perderá su «loft» o esponjosidad. Puede cubrir la parte superior de la prenda para protegerla del polvo y la luz solar. De esta manera, su abrigo se mantendrá limpio y fresco para la próxima temporada invernal.
No hay razón para sentirse intimidado por las confusas instrucciones de lavado de la chaqueta. Si sigue estos sencillos pasos, dejará su chaqueta de plumas limpia, esponjosa y como nueva. ¡Pruébelo y verá!